Yo utilicé un molde de cristal, forrado con papel de estraza. No me atreví a utilizar un molde de silicona nuevo que tengo, pero la próxima vez dejo a un lado los miedos. Ya que he visto cómo sale con la cantidad de masa, haré el doble para rellenar el molde de silicona (que es bastante grande) y que me salga hermoso.
Lo que sí que estrené fue mi nueva rejilla para enfriar bizcochos. Para las reposteras que se inician os diré que enfriar los bizcochos y tartas que salen del horno en una rejilla hace que se airee bien la pieza por arriba y por abajo. Así no se condensa el calor en la base (cuando no puede respirar), lo que provoca que se quede blanda. Mi rejilla me costó 4 euros (en www.gaudirtienda.com), no es una gran inversión, pero también sirve la rejilla del horno.
|
450 gr de leche
40 ml de aceite de oliva suave
200 gr de harina
250 gr de azúcar
75 gr de chocolate en polvo Valor sin azúcar
1 sobre de levadura (si es para alérgicos al huevo, asegúrate que no tenga trazas)
Preparación: 1.- Encendemos el horno y precalentamos a 180ºC, calor arriba y abajo.
2.- Ponemos todos los ingredientes en el vaso, empezando por los líquidos. Por este orden: la leche, el aceite, la harina, el azúcar, el chocolate y el sobre de levadura y mezclamos 10 segundos en velocidad 5.
3.- Forramos con papel de horno un molde de 18-20 cm (así quedará alto), previamente engrasado y horneamos unos 40 minutos a 180ºC. Ya sabes, pincha con una varilla y comrpueba que sale limpia.
Espera a que se enfríe y espolvorea azúcar glas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Cuéntame!