Total, que decidí que la cena de ese día sería una de las recetas escogidas: salteado de arroz con pollo, pasas y nueces. Y tuve buen ojo o paladar, según se mire, porque está deliciosa. Lo que más me gustó es el toque que le aporta el zumo de manzana que se añade a la cocción y en el que se hidratan las pasas durante dos horas (hay que ser previsor para que no nos pille el toro cuando vayamos a preparar este plato).
Así quedó el plato, que tiene cierto aire oriental.
Foto, Miss Lacraft |
Ingredientes:
400 gr de pechuga de pollo. Yo utilicé solomillos de pollo
300 gr de arroz blanco de grano redondo
2 cucharadas de pasas
Zumo de manzana (un brik pequeño)
1/2 cebolla
Aceite de oliva
Un puñado de nueces
Sal
Pimienta
Elaboración:
Ponemos las pasas en un recipiente cubiertas con el zumo de manzana dos horas antes de la preparación. Calentamos agua en un cazo, incorporams el arroz y cocemos 15 minutos, hasta que esté al dente. Escurrimos.
Troceamos la carne de pollo. Pelamos y picamos en juliana fina la cebolla y pochamos en una sartén con aceite de oliva. Cuando cambie de color y esté blandita, incorporamos el pollo salpimentado y salteamos.
Añadimos las pasas con tres cucharadas más de zumo de manzana y las nueces ligeramente picadas.
Removemos e incorporamos al wok el arroz, mezclamos bien y salteamos durante cinco minutos. Rectificamos de sal si es necesario y servimos.